Magnificat

Buscas retirarte a orar en un desierto, o quizá en una famosa casa de ejercicios religiosa, pero olvidándote de que el mejor desierto está en tu interior, eres tú.

 

 

Rafa Redondo

 

Salí de ti,
y a ti regresaré
vaciado de mí…

 

 

Rafa Redondo

He visto una vez más
que el don del per-don
me hace vacío, libre,
y disponible;
pues me hace, nos hace (y nos deshace),
vasos de lo sagrado,
recipientes del Ser.
Todo Uno, y Uno en todo:
el don de per-donar
y per-donarse.
Magníficat…
Rafa Redondo

 

Otoñea el Alma

Viento y lluvia en este atardecer de octubre. Hojas en caída libre. Otoñea el alma.
«Que lo ilimitado despunte entre los nimbos», así parece orar el húmedo cemento, hecho tambor en el vierteaguas de mi elegida soledad.
“Tiempo desapacible…”, dicen.
Dulce, a pesar de todo y nada, el leve canto del silencio.
Rafa Redondo

 

Nuevo libro de Rafael Redondo Barba

 

 

Nuevo libro de Rafael Redondo Barba
«La Presencia del Jesús interior»
Gracias por tanto, mi querido Rafa. Eres un regalo.
El libro que presentamos desafía lo conocido, la interpretación del mundo que nos han enseñado. Nos enseñaron que hay que temer a la muerte y Rafael nos dice que donde tantos veían muerte, floreció la vida y que la muerte supone la mayor seguridad. Nos dijeron que no hay que fracasar, y él nos dice que todo puede convertirse en gracia, que la fuerza proviene de las derrotas, y que en toda angustia hay una salida. Nos dijeron que nuestra vida está marcada por un tiempo lineal, que fluye del pasado hacia el futuro, y que ocupamos un lugar determinado en el espacio. La física teórica ya ha desmentido esto, así, Carlo Rovelli nos dice: “El tiempo no tiene orientación: la diferencia entre pasado y futuro no existe en las ecuaciones elementales del mundo, es solamente un aspecto contingente que aparece cuando observamos las cosas descuidando los detalles.” Rafael, por el contrario, está muy atento, atento al milagro: tan sólo cabe la atención al milagro de la respiración, no desenfoca su mirada, sino que descubre el aliento de vida en su interior. Por eso nos dice algunas cosas que son desafíos a nuestra forma de entender el mundo: Mi cuerpo en determinados momentos, deja de ser ese volumen cilíndrico aislado, recortado en el espacio, para tornarse más amplio que todo el universo. Nos habla también de un sorprendente encuentro que sucede en un lugar sin lugar, ajeno al tiempo. Él describe una fuerza atemporal, ajena al calendario, que nos permite nacer al instante, que nos libera de las ataduras espacio-temporales.
( Del prólogo de Alicia Martínez Martínez )
Música: Enya – Caribbean Blue

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