…Atento…

 

El creador de vida -o artista de la vida- es un ser a la espera. Atento como un pescador sobre un lago helado, vigilante como guepardo, alerta como un piel roja merodeando en terreno hostil.
El creador de vida, sabe de la nada; tiene honda fe en ella. Él mismo es Nada, depone su existencia porque tras ella atisba confiado la Presencia en sus latidos. Confía en su brotar.

 

 

 

En las oscuras horas
también la Infinitud te habita.
También
en las oscuras horas,
su luz puede abrasarte
fluyendo por tus venas.
Faro que al retirarse ama,
que al apartarse dona.
En las horas oscuras…
de corazón te digo
que esto no es literatura.

 

 

R.R.

 

 

…Allende el tiempo y el espacio…

Esa es mi angustia: vivirme tan sólo como carne, exiliado en el cuerpo, repatriado del Alba que no cesa.
Ese es mi Despertar: reventar el límite corpóreo, y ver brotar surcos de fuego y luz entre mis células.
Te escucho, Dios Abba, sin forma, y veo, y palpo en el latido de todo lo que en ti me vive y me re-vive.
Y me dejo llorar en tu rocío, Madre Total del Universo, mientras, armado de valor, me hundo y más me hundo en el pozo abisal de tus silencios.
Tú, Ruáh, aliento en todo aliento, reclamo a todas horas;
cauce y camino virgen donde el miedo a perderte se evapora, al filo de este instante, cuando el asombro brota.
Ese raro don,
que se derrama en todo ser viviente,
esa antorcha en la umbría
que alumbra este dialogante soliloquio
en la espesura de las noches.
Sí, ese raro don,
que asoma entre las grietas del Vacío:
mi desnudez, tan tuya,
magnánima ceniza enamorada,
las sola piel como único aderezo,
Como ese raro don
que brota al apagarse los sentidos,
y aquietarse el cerebro y pensamiento,
cuando se extingue ese eco enloquecido…
tan leve, tan suave, tan despacio
brotando igual que niño en hondo asombro…
allende el tiempo y el espacio…
 Música:   Franco Battiato  –  No time No space

 

 

 

 

…un constante mutar…

Quisiera ahorrarme el dolor, la impaciencia que trae consigo, y el sufrimiento que con él acecha. Pero (llegó la adversativa) aunque no lo deseo como amigo, me ofrece la oportunidad de abandonar lo que, pretencioso, creía saber o conocer de mí. Y eso me hace libre.

 

 

Cambia de forma
o se desnuda de ella.
Un constante mutar
que nunca extingue.
Sopla salvajemente
donde le da la real gana.
Al filo de este instante
engendra el alma
que atraviesa tus poros.
Escucha, por favor, escucha,
pero no a mí, escucha al SOPLO…
¡Joder, no te distraigas!
 R.R

 

 

Música:  Bill Douglas _ Heaven in a Wild Flower

 

 

Meditación Bilbao