…desprenderme de todo…

Podrá la enfermedad
frenar mis brazos, dedos, lentificar mi caminar…
Mas no mi gratitud
ante la Fuerza del Amor que me conforta.
Su ausencia, incluso, es el imán
que a Él me retorna…
R.R
He aprendido que cuando a nada puedes aferrarte, el Ser se deja ver y se revela…
R.R
Desprenderme de todo,
dejándome habitar por lo que aflora.
R.R
Oh, «el más allá…
¿Por que llamarle así
al «mas adentro»?
R.R

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